Torio en China no es solo una tendencia emergente, es una estrategia nacional a largo plazo que puede transformar el panorama energético global. Con enormes reservas de este elemento químico y una inversión tecnológica sostenida en reactores avanzados, China está apostando por un modelo de energía nuclear limpia, segura y altamente eficiente. En este artículo te contamos cómo lo está haciendo, qué significa el torio y por qué el mundo debería estar prestando más atención a esta apuesta visionaria.

Qué es el Torio y por qué es clave para el futuro energético

El torio es un elemento químico (Th, número atómico 90) que puede utilizarse como combustible nuclear alternativo al uranio. Aunque no es directamente fisible, puede convertirse en uranio-233 mediante un proceso dentro de ciertos tipos de reactores nucleares.

Entre sus ventajas frente al uranio destacan:

• Mayor abundancia natural en la Tierra
• Menor riesgo de accidentes catastróficos
• Producción de residuos radiactivos menos tóxicos y con menor vida útil
• Baja probabilidad de ser utilizado para armamento nuclear

Estos beneficios hacen que el torio esté considerado como una pieza clave en el desarrollo de una energía nuclear limpia y segura.

El papel estratégico de China en el desarrollo del Torio

China no solo posee importantes reservas de torio, sino que además ha decidido liderar su aplicación tecnológica. Desde 2011, el país ha puesto en marcha un ambicioso programa de desarrollo de reactores de sal fundida, diseñados para utilizar torio como combustible principal.

Iniciativas destacadas

• El gobierno chino ha financiado con miles de millones de dólares un programa para desarrollar reactores de torio a gran escala.
• En 2021 se inauguró el primer reactor experimental de torio en sal fundida en Wuwei, provincia de Gansu.
• Se prevé que los primeros reactores comerciales estén operativos en la próxima década si las fases de prueba continúan con éxito.

El objetivo es claro: lograr una independencia energética estratégica que reduzca la dependencia del carbón y del uranio importado, al mismo tiempo que posiciona a China como líder en tecnologías nucleares de nueva generación.

Reactores de sal fundida: la tecnología detrás de la revolución

Los reactores de sal fundida (MSR) son una tecnología nuclear avanzada que ha resurgido con fuerza gracias al impulso chino. A diferencia de los reactores convencionales, los MSR utilizan una mezcla líquida de sales que actúa como refrigerante y permite trabajar a temperaturas más altas con menores presiones internas.

Ventajas clave de los MSR

• Alta eficiencia energética
• Seguridad pasiva: en caso de fallo, el sistema se apaga solo por física natural
• Posibilidad de utilizar torio como combustible principal
• Menor generación de residuos radiactivos

China está invirtiendo en esta tecnología no solo como una solución técnica, sino como una plataforma estratégica para su crecimiento económico y posicionamiento internacional.

Impacto global del torio en el equilibrio energético

El avance de China en el desarrollo del torio como fuente energética puede tener profundas implicaciones a nivel global:

• Reducción de emisiones: al reemplazar fuentes fósiles por energía nuclear limpia
• Reconfiguración geopolítica: países que dominen esta tecnología podrían reducir su dependencia energética del exterior
• Impulso a la innovación: si China logra demostrar la viabilidad técnica y económica de los reactores de torio, otros países seguirán su ejemplo

Países como India, Noruega y Estados Unidos ya han mostrado interés en el torio, pero es China quien lidera actualmente el desarrollo de esta tecnología con una estrategia a largo plazo.

El Torio en China y la independencia energética

Uno de los grandes objetivos de China es alcanzar una independencia energética sostenible. A diferencia del petróleo o el gas, cuyas importaciones pueden volverse vulnerables en contextos de crisis internacionales, el torio representa una fuente de energía interna, segura y controlada por el propio país.

Este enfoque tiene varias implicaciones:

• Menor dependencia de proveedores externos de uranio
• Reducción del uso de carbón, que aún domina la matriz energética china
• Posibilidad de exportar tecnología y know-how nuclear limpio a otros países

China no solo busca autoabastecerse, sino convertirse en una potencia exportadora de tecnología nuclear avanzada basada en torio.

El torio en China es mucho más que una apuesta energética. Es un movimiento estratégico que combina innovación tecnológica, sostenibilidad ambiental y ambición geopolítica. Si bien aún quedan desafíos técnicos por superar, los pasos que está dando China podrían cambiar para siempre la forma en que producimos y consumimos energía en el mundo.

Más allá del potencial del elemento, lo que impresiona es la visión a largo plazo y el compromiso tecnológico. Mientras otros países siguen debatiendo sobre modelos energéticos, China ya está construyendo el futuro con torio.